axilar, lo que puede precisar la extirpación de parte de dicho vaso. El aumento de tamaño de
los nódulos apicales puede obstruir la vena cefálica superior al pectoral menor.
Lesiones del plexo braquial
Las lesiones del plexo braquial afectan a los movimientos y la sensibilidad cutánea del
miembro superior. Las patologías, estiramientos y heridas en la región cervical lateral
(triángulo cervical posterior) o en la axila pueden producir lesiones del plexo braquial. Los
signos y síntomas dependen de qué porción del plexo braquial está implicada. Las lesiones del
plexo braquial provocan parálisis y anestesia. La exploración de la capacidad del sujeto para
llevar a cabo distintos movimientos permite valorar el grado de parálisis. En la parálisis
completa no se detectan movimientos. En la parálisis incompleta, no todos los músculos están
paralizados; porello, el paciente puede moverse, aunque los movimientos son débiles
comparados con los del lado no lesionado. La determinación de la capacidad de la persona
para sentir dolor (p. ej., pellizcando la piel) evalúa el grado de anestesia. Las lesiones de las
porciones superiores del plexo braquial (C5 y C6) están provocadas normalmente por un
aumento excesivo del ángulo entre el cuello y el hombro. Estas lesiones pueden ocurrir cuando
una persona sale despedida de una moto o un caballo y el hombro impacta con el suelo de
manera que el cuello se separa ampliamente de él. Cuando se sale despedido, a menudo el
hombro choca bruscamente con algún objeto (p. ej., un árbol o el suelo) y se frena, mientras
que la cabeza y el tronco continúan en movimiento. Esto estira o rompe las porciones
superiores del plexo braquial o avulsiona (arranca) las raíces del plexo de la médula espinal. La
lesión del tronco superior del plexo braquial se reconoce por la posición característica del
miembro («posición de petición de propina del camarero»), en la cual el miembro cuelga a un
lado en rotación interna. Las lesiones de la porción superior del plexo braquial pueden
producirse también en el recién nacido, cuando tiene lugar una tracción excesiva sobre el
cuello durante el parto. Como resultado de las lesiones de las porciones superiores del plexo
braquial (parálisis de Erb-Duchenne), se produce parálisis de los músculos del hombro y el
brazo inervados por C5 y C6: deltoides, bíceps braquial y braquial. La apariencia clínica habitual
es un miembro superior con el hombro aducido, el brazo rotado internamente y el codo
extendido. La cara lateral del antebrazo también sufre una cierta pérdida de sensibilidad. Los
microtraumatismos crónicos en el tronco superior del plexo braquial por transporte de
mochilas pesadas pueden producir déficits motores y sensitivos en la distribución de los
nervios musculocutáneo y radial. La lesión del plexo braquial superior puede provocar
espasmos musculares y una grave discapacidad en excursionistas (parálisis de los mochileros)
que cargan mochilas pesadas durante largos períodos. La neuritis aguda del plexo braquial
(neuropatía del plexo braquial) es un trastorno neurológico de causa desconocida que se
caracteriza por la aparición brusca de dolor intenso, por lo general alrededor del hombro.
Normalmente, el dolor se inicia de noche y se sigue de debilidad muscular y, en ocasiones, de
atrofia muscular (amiotrofia neurológica). La inflamación del plexo braquial (neuritis braquial)
suele estar precedida por algún acontecimiento (p. ej., infección respiratoria alta, vacunación,
traumatismo inespecífico). Las fibras nerviosas afectadas suelen proceder del tronco superior
del plexo braquial. La compresión de los fascículos del plexo braquial puede ser la